Ingredientes
- 1/2 barra de pan
- 1/2 litro de leche
- 1/2 palo de canela
- La piel de un limón
- 2 huevos
- 1 vaso de azúcar
- 1 cucharada de canela en polvo
- Aceite de girasol
Preparación
1. Corta 8 o 10 rebanadas de pan de aproximadamente dos dedos de grosor. Ponlas en un recipiente amplio y con un poco de fondo.
2. Calienta la leche en un cazo con el palo de canera, 1 cucharada de azúcar y la piel del limón. Revuélvela a menudo para que no se queme ni se forme nata. Déjala hervir un poco de vez en cuando.
3. Pasados unos 20 minutos, retira el cazo del fuego y vierte la leche poco a poco sobre las rodajas de pan. Deja que se empapen bien de la leche que quede en el fondo.
4. Bate los huevos en un plato hondo.
5. En otro plato hondo mezcla el azúcar con la cucharada de canela en polvo.
6. Pon aceite de girasol abundante a calentar en una sartén.
7. Cuando tengas todo preparado y el aceite esté caliente, coge con cuidado una a una las rebanadas de pan empapadas en leche y pásalas por el huevo, que se mojen bien por ambos lados y por los laterales.
8. Con cuidado de no quemarte échala en la sartén, deja que se fría por un lado y dale la vuelta.
9. Cuando esté frita por ambos lados, escúrrela con la espumadera y ponla sobre una fuente plana con papel absorvente. Repítelo con todas las rebanadas.
10. Una vez que hayas frito todas las torrijas y hayan escurrido unos minutos en el papel absorvente, rebózalas en la mezcla de azúcar y canela.
Buon appetito !!
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